Powered By Blogger

sábado, 23 de febrero de 2013

Capítulo 18


Cuanto mas subían mas densa se hacía la selva.
Tenían los pies embarrados y pesados,los estómagos rugían de hambre y la selva era fría y oscura.
Hacia unas tres horas que había sido la última vez que habían descansado y comido algo.
La fruta empezaba a escasear después de tres días y los animales salvajes desaparecían con el menos ruido.
No había indicios de ningún templo y tampoco de ningún peligro.
-¿Estás segura de que vamos por buen camino?-le había preguntado Cedrik.
-Sigue recto de espaldas a la orilla,¿recuerdas?-contestó ella.
-La orilla hace ya cuatro días que no la vemos-dijo Jon-tal vez estemos dando vueltas y ahora mismo la tengamos enfrente.
-No-dijo Alexys segura-se que es por aquí.
De nuevo la noche cayó.Los chicos se turnaban para vigilar mientras otros descansaban.
Habían pasado ya cuatro días y el reloj seguía contando.Si no encontraban el templo se quedarían en la isla para siempre.El príncipe Arys había dado solo una semana y a ellos solo le quedaban tres días.
La selva era inmensa,llena de árboles y enredaderas que no dejaban ver nada.Quizá Jon tuviera razón y solo estaban dando vueltas o quizá se encuentren a un paso del templo,pero si fuese así ¿donde estaban los peligros que en el acertijo se nombraba?
La mañana llego con unas pequeñas gotas de lluvia calando a todos,pero si querían avanzar tenían que seguir adelante fuese como fuese.
Mas adelante se encontraron rodeados de unos enormes arboles en lo que parecía ser un claro.El suelo estaba completamente despejado y liso y lo único que había eran esos enormes arboles en forma de circulo.
Era extraño que esa zona estuviese así,pero haciendo caso omiso siguieron como si nada.
Un extraño ¨Click¨resonó con eco en toda la zona y seguido un fuerte crujido de arboles les alerto que debían salir corriendo de allí si no querían quedar sepultados bajo los arboles.
-¿Qué ha pasado?-preguntó Genna.
-Hemos encontrado uno de los peligros-contestó Alexys.
Y encontraron mas,tal y como había dicho el príncipe Arys.
Una lluvia de rocas sobre sus cabezas,una bandada de murciélagos chillones,jabalíes salvajes y locos y una sucesión de peligros les persiguieron hasta llegar al primer escalón del Templo Prohibido.
Delante de ellos se alzaba el edificio mas grande que jamás habían visto.La roca estaba desgastada,pero aun se podía contemplar lo hermoso que antaño llego a ser.Había una fila de escalones infinitos que daban lugar a una enorme entrada custodiada por dos enormes leones de oro con rubíes incrustados como ojos.
Las paredes estaban llenas de musgo y enredaderas,pero se podía divisar que estaban completamente llenas de jeroglíficos de una lengua desconocida para todos.
La enorme entrada no tenía puerta,era un agujero oscuro y frío por el que en pocos segundos pasarían a través de el.Era oscuro,tan oscuro como la boca de un lobo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario